Esperanza de vida del VIH ahora «casi normal» gracias a los avances médicos
Los jóvenes que toman los últimos medicamentos contra el VIH ahora pueden esperar vivir casi tanto como la población promedio gracias a los avances en la medicina.
No hace mucho tiempo que un diagnóstico de VIH era tan bueno como una sentencia de muerte.
En las décadas de 1980 y 1990, muchos creían que la incomprendida enfermedad era una especie de «cáncer gay» y cobraba vidas jóvenes a un ritmo alarmante.
Aunque todavía no existe una cura para el virus hoy en día, investigaciones recientes muestran que las personas que viven con la enfermedad finalmente pueden esperar vivir una vida bastante normal gracias a los nuevos avances en la medicación.
Los jóvenes de veinte años que comienzan la terapia con medicamentos poco después de su diagnóstico tienen una expectativa de vida promedio de 78 años, que refleja de cerca la de la población general, según un nuevo estudio de la Universidad de Bristol.
Eso es diez años más de lo que cualquiera podría esperar en 1996, gracias a los avances en el tratamiento antirretroviral, que ha sido calificado como “una de las mayores historias de éxito en salud pública de los últimos 40 años”.
La terapia antirretroviral combina tres o más medicamentos que, si se toman una vez al día, detienen la replicación del virus.
Esto ha cambiado desde los primeros días del tratamiento, cuando había que tomar docenas de medicamentos diferentes a diferentes horas del día.
Hoy en día, la cantidad limitada de medicamentos necesarios se puede combinar en una pastilla que se toma a la misma hora todos los días, lo que también tiene menos efectos secundarios.
“Esperamos que los resultados de este estudio contribuyan en gran medida a eliminar finalmente cualquier estigma asociado con el VIH y garantizar que los pacientes con VIH puedan vivir una vida larga y saludable sin experimentar dificultades para conseguir empleo y, en los países donde sea necesario, obtener seguro médico”, dijo la profesora Helen Stokes-Lampard sobre la nueva investigación.
Ahora, el enfoque para las personas que trabajan para lograr esos objetivos es el diagnóstico temprano, ya que se cree que una de cada ocho personas con VIH no ha sido diagnosticada.
Aunque esta proporción de la población ha disminuido constantemente durante los últimos 20 años, el desconocimiento sigue siendo una barrera clave para el tratamiento en el mundo en desarrollo (donde ocurre la mayoría de las muertes por VIH).
Desarrollar nuevos tratamientos ya no es la prioridad para detener el VIH, concluye el estudio. Más bien, la desestigmatización y el acceso a medicamentos antirretrovirales asequibles son lo que impulsará al virus a la inexistencia.
A continuación, conozca la historia de David Kirby y la foto que cambió la percepción mundial sobre el SIDA. Luego, vea la nueva investigación que finalmente acabó con el mito del “Paciente Cero” del VIH/SIDA.