Las pruebas de aguas residuales para COVID-19 sugieren que la ‘sexta ola’ de infecciones en la región de Valencia de España ha pasado

Un análisis de aguas residuales en la ciudad de Valencia muestra que los casos de COVID-19 han alcanzado su punto máximo en la sexta ola de la pandemia.
La prueba no detectó el coronavirus, sino solo un segmento muy pequeño (alrededor del 0,1%) del material genético del virus, llamado ARN.
La planta de tratamiento de aguas residuales envía muestras de aguas residuales a un laboratorio, que luego realiza un análisis rápido de los niveles de ARN en las heces.
Valencia ha sido una de las pioneras en España en realizar este análisis, que hasta el momento ha arrojado predicciones certeras sobre el estado de la pandemia.
Los números dan una ventaja de hasta dos semanas sobre lo que finalmente muestran las pruebas tradicionales de COVID-19.
En Valencia, el sitio de muestreo del 28 de diciembre alcanzó los 665 millones de unidades genómicas.
Ese número cayó a 148 millones de unidades el miércoles.
Según dos años de tales estudios, se espera que los nuevos casos de COVID-19 disminuyan significativamente durante las próximas dos semanas.
“La variante Omicron fue la variante principal en todos los análisis, pero no se puede determinar su porcentaje exacto porque es muy complejo de analizar”, dijo Elisa Valia, comisionada de la Comisión Valenciana del Agua.
Las pruebas de agua no pueden confirmar casos individuales ni brindar detalles exactos sobre la causa del brote de COVID-19, pero tienen la gran ventaja de brindar resultados rápidos y una gran cantidad de muestras inmediatas.
Valia advirtió que la fuerte caída en las pruebas de coronavirus no significa necesariamente la misma caída porcentual en los casos oficiales de COVID-19, aunque esta ha sido una tendencia general durante la pandemia.
Lee mas: