Azerbaiyán dice que Rusia no cumplió con las obligaciones del alto el fuego en Karabaj

Azerbaiyán acusó a Rusia el domingo de no cumplir con sus obligaciones en virtud de un acuerdo de alto el fuego de 2020 negociado por Moscú para poner fin a la lucha con Armenia por el control de la región de Nagorno-Karabaj.
«La parte rusa no ha garantizado la plena implementación del acuerdo en el marco de sus obligaciones», dijo el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bakú, y agregó que Moscú «no tomó medidas para evitar» que los suministros militares armenios lleguen a las fuerzas separatistas en el inquieto enclave.
En el otoño de 2020, Rusia firmó un alto el fuego que puso fin a seis semanas de lucha en la región montañosa separatista.
Armenia cedió grandes extensiones de territorio en virtud del acuerdo, mientras que Rusia desplegó fuerzas de paz en el Corredor Lachin de cinco kilómetros de ancho, el único enlace terrestre del enclave con Armenia.
Bakú cerró recientemente el corredor, lo que provocó protestas y temores de una crisis humanitaria.
El sábado, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia instó a Azerbaiyán a reabrir el paso.
También dijo que el reciente reconocimiento de Karabaj por parte de Armenia como parte de Azerbaiyán «cambió fundamentalmente el estado del contingente ruso de mantenimiento de la paz».
«En este caso, la responsabilidad por el destino del pueblo armenio de Karabaj no debe transferirse a un tercer país», dijo el comunicado, posiblemente refiriéndose a los llamados de los separatistas armenios a Moscú para garantizar la reapertura de los enlaces terrestres.
El presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, y el primer ministro de Armenia, Nikol Pashinyan, se reunieron el sábado en Bruselas para mantener conversaciones con la mediación de la Unión Europea para resolver su conflicto de décadas por el control de Karabaj.
Bakú y Ereván han estado tratando de negociar un acuerdo de paz con la ayuda de la Unión Europea y Estados Unidos, cuyo creciente compromiso diplomático en el Cáucaso ha enfurecido a Rusia.
Para reafirmar su papel como agente de poder, Moscú ofreció el sábado recibir a los ministros de Relaciones Exteriores de los dos países y sugirió que en el futuro podría firmarse un tratado de paz en Moscú.